Y llegó el día más esperado por los hinchas de Sportivo Desamparados. Finalmente, luego de 19 meses de espera atravesados por la pandemia, el pueblo Puyutano pudo alentar nuevamente a sus jugadores en las tribunas, sin radio ni TV de por medio. En vivo y en directo, como en los viejos tiempos. El «Verde, mi buen amigo» se hizo sentir con fuerza, emocionando a más de uno que añoraba con ansias el regreso.
La mañana soleada, lejos del fuerte viento que azotó ayer a la provincia, ayudo para que los simpatizantes se acercaran en buen número a la cancha para ver a su equipo enfrentar a Ferro de General Pico, por la 26ta fecha del Federal «A». Y fue con triunfazo.
En un partido luchado, Desamparados se hizo fuerte y comenzó a presionar a la visita que no tuvo más remedio que armar línea de cinco y defenderse se los embistes del Víbora.
A los 39 minutos de la primera parte, los dirigidos por Fuentes lograron abrir el marcador. Por derecha, Martín la empaló para Ricardo Tapia, quien la acomodó con el pecho y con un fuerte remate cruzado contra el palo derecho del arquero marcó el único tanto del equipo, desatando la locura de todos que pudieron soltar el grito atragantado.
El segundo tiempo fue aguantar y tratar de buscar el contragolpe letal, que no llegó.
«Este partido era una final si queremos dar lucha. Tengo una felicidad única. Me está tocando convertir en momentos claves», aseguró el goleador tras el partido.
